Hace casi ya un mes que empezó el rodaje del documental de Lonely Planet en el que participamos pero ¡por fin hoy termina (casi) todo!. Hoy el cámara australiano, el director indio, el presentador norteamericano, el chico para (casi) todo de Gernika y mi mare, valencià ella, se despiden y cada uno marcha para su casa. (Y lo de las procedencias es verídico, aunque pueda parecer el inicio de un chiste)
En este tiempo ha habido de (casi) todo: amabilísimos pastores que han compartido su producción con el equipo tras una dura y larga ascensión a las cumbres; no tan amabilísimos curas que pensaban que el equipo era una delegación de Sodoma y Gomorra enviada a su feudo para envilecer su preciada fiesta; visitas a las urgencias hospitalarias por inflamaciones en zonas del cuerpo que es mejor no citar; adolescentes borrachos en el comienzo del (casi seguro) mejor verano de su vida en la Sanjuanada de A Coruña; bajar a los infiernos y sobrevivir a hordas de (no tan) adolescentes en la Batalla del vino en Haro; frustración tras pretender surfear la «mejor ola de Europa» en Mundaka el día que más plato está la mar,… pero sobre todo ha habido trabajo. SIMPLEmente, trabajo.
Mientras esperamos a poder ver el documental en el National Geographic Channel, sólo una cosa: Eskerrik asko Aditya, Eskerrik asko Dominic, Eskerrik asko Dani, Eskerrik asko Peter, Eskerrik asko Leyre